Sí, sí, contraintuitivo y contra las enseñanzas de toda escuela de finanzas, administración, negocios y sentido común. Ya estamos entrando bien en el año, y hemos arrancado durísimo, pero en esos momentos de respiro entre juntas que escribo estas líneas, me di a meditar y quiero compartirles, el (que yo creo) mejor consejo a los directores, emprendedores y futuros emprendedores.

En el año que escribimos este artículo (2020), vivimos un cambio radical de gobierno y política administrativa y económica del país, que si bien, puede ser discutible, uno de los efectos inapelables es que el crecimiento económico se ha estancado o más bien, es negativo, es decir, nos estamos encogiendo.

Otro hecho actual, es el cambio radical de política, que ha espantado a diversos inversionistas y han decidido retener o cancelar definitivamente sus inversiones en México; por lo que proyectos, empresas, programas de TI, eventos, fábricas y muchos otros factores de inversión, de los que dependían muchas compañías mexicanas, no han arrancado. Dejando expuestas, moribundas o muertas a muchas compañías.

La sabiduría convencional dice que debes despedir gente, prepararte para lo peor y simplemente sobrevivir. Pero esta actitud termina normalmente siendo el golpe de gracia para la mayoría de las empresas.

Entonces, ¿qué hacer? En realidad es muy sencillo, tienes que salir a la ofensiva, no ponerte a la defensiva, y para tu incredulidad tengo dos ejemplos:

Candy Crush, la empresa King.com casi pela papas en 2003, que se había acabado su financiamiento, ningún juego había pegado, entonces al final del segundo financiamiento, empezaron a ver un montón de descargas y el juego se volvió monetizable y generó un revenue de USD $2.1 BILLONES, con B. Bien pudo haberse encogido y desaparecer en el tiempo, pero no, decidieron salir adelante y pelear con un último pase milagroso, que se volvió en la mejor anotación de la empresa. 

¿Quieres un ejemplo más local?

Carlos Slim¿El magnate mexicano? Sí ese. ¿Este que se hizo rico con Telmex? Nope, ahí te equivocas, si alguna vez has leído la historia de Slim te darás cuenta que es un rico que se ha hecho solo.

Te invito a leer “Los amos de México”, de Jorge Zepeda (que por cierto no es nada amable con Slim), donde nos deja en claro, que Slim desde pequeño era un gran ahorrador, y en cuanto pudo, vertió su dinero a inversiones, inversiones, inversiones. Cuando salió graduado como ingeniero de la UNAM, ya tenía una suma de dinero bastante envidiable, pero nada estratosférico. Y con ese dinero decidió…. inveritr, creando numerosas empresas.

Y vino su enorme acierto, pero este acierto no fue comprar Telmex, fue mucho antes, en la crisis de los 80 en México, que se implementaron cambios radicales en el sistema económico (te suena familiar), Slim fue a contracorriente y decidió invertir en México, adquiriendo varias compañías, donde todos los demás estaban huyendo, vendiendo y guardando su dinero, Slim decidió invertir, por ejemplo adquirió Sanborns, General Tire, Reynolds Aluminio, BAT, Bimex, Firestone y otro tanto de empresas. ESAS, son las que lo hicieron asquerosamente rico (a falta de una mejor descripción).

No fue hasta 1990 donde adquirió Telmex, que por cierto, ya tenía el dinero para hacer eso. Ahora esto no indica que no sea polémico, a decir menos, el ingeniero, pero indudablemente bueno para los negocios, y su estrategia se basa en atacar cuando otros huyen.

Y así podemos encontrar muchos ejemplos, Warren Buffet, el hombre más rico del mundo, Elon Musk que compró Tesla cuando iba de caída y otros tantos. La enseñanza es simple, en época de crisis no te encoges, sales a pelear.